viernes, 27 de febrero de 2015

EL PRINCIPAL ERROR HUMANO




EL PRINCIPAL ERROR HUMANO




Cuanto tiempo esperé que el arco iris brillara 
en los campos santos, donde las margaritas  asoman tímidas al lado de las amapolas, que por su color rojo intenso resaltan entre la hierba verde.


Más no es la atracción de sus vestidos lo que me importa, si no, el color inmaculado del interior,  da igual si es en un ser humano, un animal, una planta o una flor…en la sencillez, está la clave de la felicidad.

No es siempre la apariencia sencilla, un casto templo de amor, la máscara humilde suele usarse para engañar a un corazón bueno, que es engañado, sin un atisbo de compasión, sobre estos pastos terrenales.


"Es el principal error del ser humano, 
dejarse guiar de la apariencia"


© Coral Ruiz 2015


LAS ALAS DE TUS ANSIAS


LAS ALAS DE TUS ANSIAS 

Dame tiempo para entender,
déjame espacio para asimilar
este gran cruce de aguas peligrosas
que debo atravesar agarrada a mi destino.

 No tengas prisa, no corras por favor
no me agobies más con tu actitud negativa
porque no hayas aprendido a saber esperar.

La prisa nos lleva a cometer errores,
errores que no deseo volver repetir 
 en este paisaje de cambios importantes, 
de resoluciones entre el bien y el mal.

Aún quedan restos de nostalgias
...de sueños rotos...de desencantos 
...de experiencias por claudicar
...de hiedra amarga en mis labios
...de dolor en el corazón, 
que debe de ser borrado con miel de olvidos, 
con justicia celestial y terrenal.

 Los Milagros existen, 
y un milagro debe de ocurrir...
solo espero su llegada
que me abrirá la puerta de la libertad.

 No, no me presiones más
porque la inquietud aún arropa a mi alma
con las preocupaciones...
con problemas importantes que resolver.

  Si tienes prisa, si no puedes esperar
ve, corre y vuela...tienes plena libertad...
Si...corre, ve y vuela, sí, vuela...
donde la alas de tus ansias te deseen llevar.

Coral Ruiz
Derechos Reservados

sábado, 21 de febrero de 2015

EN ESTOS VALLES ESPIRITUALES



EN ESTOS VALLES  ESPIRITUALES

Cuando las estaciones 
se suceden unas a las otras, 
los cambios son inevitables... 
...estaciones sociales y personales 
porque la vida es mutante, 
está en constante movimiento.

Y el océano de mis pensamientos, 
transparentes y claros, 
en este instante 
de decisiones importantes, 
de resoluciones del destino, 
hace volar mis pensamientos 
hacia ese Amanecer soñado 
donde la felicidad está augurada.

…sí, ese vuelo personal 
que me invita a pasear por la playa 
de mis momentos íntimos 
en comunión con mi yo interior, 
donde La Fuente Causa Primera 
me habita desde el momento 
de mi creación.

Respirar el oxígeno 
de la espiritualidad, 
me ayuda a ir evolucionando 
en esta escuela terrenal, 
donde a veces el estancamiento, 
de la mano del materialismo 
y los egoísmos personales, 
se anteponen al amor altruista...

...envenenan nuestro ser, 
con el olvido de nuestra 
verdadera naturaleza, 
de nuestra esencia divina.

Y yo que estoy aprendiendo 
estas lecciones a gran velocidad, 
me tomo un respiro 
en esta agitada vida...

Ir al campo, oxigena mi mente, 
relaja mi cuerpo 
y revitaliza mi espíritu, 
que florece feliz, 
entre los trigales, 
las amapolas y las margaritas.

Y revitalizada, recorro 
estos caminos terrenales 
subida a la bicicleta 
del presente inmediato, 
que es primavera multicolor, 
en el alma de esta mujer niña, 
que ha madurado como persona 
en los avatares de la vida.


Me encanta aventurarme 
en estos valles espirituales 
que son parte mi ser, 
caminos abiertos 
para quien desee aprender.

Senderos de esperanza 
que aconsejo 
a los buscadores de la verdad.

Coral Ruiz
Derechos Reservados

martes, 17 de febrero de 2015

SORTEANDO NOSTALGIAS



SORTEANDO NOSTALGIAS


Cuando despierto 
entre la nebulosa noche 
donde los habitantes 
de cada historia duermen,
mis recuerdos me hablan titilantes 
en madrugadas espontáneas.

Mañanas de esas 
que fabrican sueños 
en la soledad del lecho 
sorteando nostalgias. 


Obstáculos establecidos 
demasiado tiempo
en ese rincón tan mío... 
donde habita el duende mágico 
que hace flotar a mi alma.


Desnudando versos 
en cada papiro sentimental 
que cae en mis manos 
de escritora y poeta autodidacta.

Y es la pluma de este sentir mío 
algo nostálgico esta madrugada
deprimido en ocasiones,
risueño otras tantas,
perfumando la estancia 
de mi corazón lánguido 
con esencias de camelias blancas.


Diseminando las paredes dormidas 
de este lecho aterciopelado de satén 
cuando el hambre aprieta insistente 
en los lienzos de mi morada 
enamorada de ti.

Y de esos labios ardientes 
anhelo constante de estos labios míos 
que gustosos se te ofrecen 
en esta marisma de pasiones infinitas.

Donde tu silueta brilla por su ausencia 
en este templo santo 
donde te cobija mi amor.

Coral Ruiz
Derechos Reservados

COMO UNA BELLA FLOR


COMO UNA BELLA FLOR

Era una bella flor que crecía libre en un campo raso, donde ella era el único adorno de aquel lugar, y era feliz con sus fantasías, siendo acariciada por el sol cada mañana, cuando el amanecer despertaba soñoliento alegrando el corazón de la flor.

El amor es una energía invisible que no puede ser vista por el ojo humano, sin embargo, es tan inmenso, tan sublime y tan grande, que no puede ser encerrado en ningún lugar fabricado por el ser humano.


A la vez, el amor es tan diminuto, en sentido figurado, que vive en el jardín interior del ser humano, donde fue instalado por Dios. Y es que el amor es un misterio...es como esa bella flor necesitada del calor del sol y de sus caricias.

© Coral Ruiz 2015


lunes, 16 de febrero de 2015

EN LA CUMBRE DEL SILENCIO




EN LA CUMBRE DEL SILENCIO



Tímidamente se asoma mi mirada 
en la cumbre del silencio 
el eco de tu voz dominante y ronca, 
me reclama e insiste 
en quebrar distancias eternas 
en las tinieblas de la noche. 

          
Y yo que simulo estar dormida, 
escucho el quejido
de un susurro lujurioso...

Y es que cuando te interesa 
y no estás ocupado 
con tus asuntos personales, 
a tientas me buscas
entre estas sábanas de deseo 
para saciar el hambre de tu cuerpo.


Y mi primavera fría 
de tanto abandono cruel, 
al instante, se ausenta de mi mente 
para no sentir el látigo del desencanto, 
poseer mis templanzas femeninas.


Mientras tú avaro 
surcas las mareas de mi cuerpo,
desierto de caricias y de amor de pareja 
en estaciones invernales.


©Coral Ruiz 2014

CUANDO LA CIUDAD DORMITA




CUANDO LA CIUDAD DORMITA



Tímidamente y con Elegancia, se desliza la brisa marina a horas tempranas, cuando la ciudad dormita en los brazos del sueño. 

Y andando a paso lento va la joven por caminos desconocidos, dejando caer sus brazos, completamente entregada al océano, que mecido por el viento calmo de la madrugada, no sopla, ni gruñe, ni pelea, tan solo silba, descansa y se balancea.


Y sonriente alza la mirada hacia el cielo claro que la mira complacido...y ella, inocente y buena, convincente y contemplativa, sonríe al amanecer de la vida y sus historias ya vividas. 



Y entre susurros nostálgicos, la gaviota del mar aletea feliz, sobre las revoltosas olas que danzan alegremente, al chocar con las rocas del acantilado.

Blanca tela de algodón se ciñe a la escultura de una damisela, que solitaria pasea a la orilla del mar, sumergida en el lago de sus pensamientos...que atrevidos...osados y veloces se asoman despacio al crepúsculo de su mente humana...que ha despertado de un sueño engañoso.

Coral Ruiz
Derechos Reservados

domingo, 8 de febrero de 2015

LA MARISMAS DE LA SERENIDAD



LAS MARISMAS DE LA SERENIDAD

Es calma, la vestimenta de esta madrugada, buscando sensaciones nuevas me hallaba, escalando remolinos internos y, encontré aquel destello de color azul que encandiló a mi alma al instante.

No es que buscara algo concreto, tampoco es, que no buscara nada. Lo cierto es, que vagabundeando por los pasillos del mundo interior, mi corazón estiraba de los pies de mi mente, y sumisa, me dejé llevar a aquella estación planetaria.

No recuerdo si era de día, de noche o tal vez, un atardecer de pensamientos volando en los cielos de mi recuerdo. No, no recuerdo, ni siquiera sé la hora exacta de aquel momento.
Aquella que intento descifrar en este papiro sentimental, en versos.

Tan solo sé, que nadaba perdida en los mares de las
tensiones, perdiendo el equilibrio que años atrás me vestía a diario. Y en esta hondonada algo rala, donde no es lisa su estampa, ni tampoco de rizos solemnes, mitad de la una y de la otra. 


Estirando de la mano de mis pensamientos, reconozco, que estoy necesitada de encontrar un razonamiento convincente
que me ayude a regresar a las marismas de la serenidad.


Coral Ruiz
Derechos Reservados